A Candela la conocimos hace justo un año, con tan solo 7 días de vida. Fue una sesión newborn preciosa, donde pudimos hacer un montón de posturitas. Es más, una de sus fotos, está adornando nuestro estudio desde entonces.

Sus papás, durante este año, han confiado nuevamente en nosotros, para ir capturando los momentos de su crecimiento. Y aquí están nuevamente, para hacer una sesión para recordar para siempre.

En nuestras sesiones de primer cumpleaños, está la opción de hacer un reportaje un poco más extenso, donde creamos diferentes decorados e intentamos inmortalizar esos gestos que tanto gustan (sonrisas, miradas, gateos…). Luego llega el momento más esperado, el momento Cake Smash, donde con una tarta riquísima y muy colorida, que nos hace Cookies & Dolços Estela, los peques disfrutan destrozándola y comiéndosela con las manos. La verdad que es una sesión super divertida, donde sin duda, tanto el cumpleañero como sus papis, tendrán un recuerdo divertido y muy muy dulce.